Las 7 claves del diseño centrado en el usuario
Al iniciar un nuevo proyecto digital, muchas empresas y entidades centran el contenido y el diseño en sus gustos y preferencias, pero pocas veces paran a pensar la importancia de contar con un diseño centrado en el usuario.
Sin duda, cuando creamos nuestra propia página web o publicaciones digitales queremos dar a conocer nuestra identidad e informar de nuestros servicios. Nos encantará ver el contenido de nuestro producto final y sentiremos realmente que es nuestro, pero ¿querrá el usuario interactuar con ese contenido con el que no se siente identificado? ¿lo verá interesante? ¿sentirá que somos diferentes respecto a nuestra competencia? ¿responderemos a la nueva comunicación bidireccional entre usuario y empresa? Puede que el diseño centrado en el usuario nos ayude a mejorar todos estos aspectos y redirigir nuestro proyecto digital hacia un nuevo enfoque con grandes ventajas.
Hoy os explicaremos las claves del diseño centrado en el usuario para que puedas sacarle partido a esta nueva visión del diseño.
¿Qué es el diseño web centrado en el usuario?
Antes de conocer sus claves, deberíamos saber exactamente en qué consiste.
El diseño centrado en el usuario (DCU) tiene en cuenta los deseos y necesidades de los usuarios, entendiendo previamente cómo interactúa con el producto.
En diseño web y editorial, esto se traduce en crear interfaces funcionales y atractivas para los usuarios, facilitando la navegación y mejorando la experiencia.
1.Simplicidad
Es uno de los atributos que aporta mayor calidad a un proyecto. Reducir la carga visual de contenido facilitará claramente la navegación y el usuario se sentirá cómodo ante una interfaz que comprende. En diseño web y editorial también vale el “ lo bueno, si breve, dos veces bueno”.
2.Usabilidad
Es el concepto estrella del diseño en entornos digitales. Hace referencia al grado de facilidad que tienen los usuarios para cumplir sus objetivos dentro de una plataforma digital. Para determinar el nivel de usabilidad, se escoge una muestra representativa de usuarios y se observa cómo interactúan con la interfaz.
3.Contenido de calidad
Las imágenes, vídeos y textos deben ser interesantes y complementarse mutuamente para que tanto el contenido como los elementos gráficos sean UNO y creen valor.
4.Orden y moderación
Todo debe estar pensado con un orden y una jerarquía. Se busca la coherencia y la comprensión por parte del usuario con animaciones puntuales que aporten valor añadido, no demostrar que somos capaces de incorporar cientos de gráficos en una única página.
5.Responsive
Al igual que la usabilidad, es otro de los mandamientos de la nueva era del diseño. Nuestro proyecto debe adaptarse en cualquier dispositivo o pantalla para que el usuario pueda verlo siempre que quiera y donde quiera.
6.Evaluación
La investigación, análisis y test de usuario son esenciales. Los estudios etnográficos y las entrevistas también aportarán información de gran valor.
Con ello, conoceremos su nivel de experiencia en un entorno interactivo, qué necesidades tiene en puntos concretos de la página web o la publicación digital, qué espera encontrar, qué elemento le dificulta continuar con fluidez la navegación…
7. Diseño iterativo
Vinculado con el punto anterior, el diseño iterativo (o creciente) consiste en recrear el proceso de navegación una y otra vez para analizar la efectividad de un producto y éste pueda ser mejorado.
Uno de los ejemplos más conocidos es el Test A/B.
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